EL GUSTO
Nuestra lengua es la encargada de percibir los sabores que probamos: dulce, salado, amargo...
Pero, ¿cómo llega a nuestro cerebro?
Es gracias a las PAPILAS que se encargan de enviar la información al cerebro y así sabemos de que sabor se trata.
Para ponerlo a prueba hemos realizado un taller y hemos podido comprobar el sabor que tienen los alimentos.
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